octubre 22, 2021

Collcerola Mágica

























Se inicia la ruta desde el Parc de Xavier Montsalvatge, un mirador de la ciudad excelente al lado del Velódromo de Horta, desde donde se pueden disfrutar bonitos amaneceres, el sendero de ascenso es bastante exigente pero una vez superado el resto de la ruta se mueve a unas alturas muy similares (ver el gráfico del perfil).
Hasta llegar al cruce del Forat del Vent la visión panorámica de Barcelona, edificios singulares y las montañas colindantes va cambiando de ángulo, pero pronto empieza el festival de senderos, aparece como por arte de magia un restaurante en medio de la nada: Casa Juaco, nos desviamos por una pista de la derecha, troncos abatidos y de densa vegetación, zarzas un tanto amenazantes que bordean la pendiente y la trialera que presenta una cierta inclinación lateral, deslizante (te agradezco el aviso Andrés), no debe ser agradable deslizarse un barranco rodeado de zarzas. esta trialera bordea la montaña que a su vez esta jalonada por una serie de rieras profundas lo que da este relieve tan espectacular.
El problema de las fotos es que no permiten apreciar la musicalidad, de un bosque espeso y lleno de vida, los diálogos entre pájaros de árbol a árbol, el eco del repiqueteo rítmico e incesante del carpintero, hojas mecidas por el viento, vamos los sonidos típicos del bosque, luego los haces de luz oscilantes colándose entre las ramas, y todo así, hasta que llegamos a la zona "Can Catà". 
.





















































































































































De repente como en un cuento, aparece una mesa de banquete tallada en piedra de unos 15 metros, con bancada a ambos lados, enfrente un auditorio invadido por líquenes, franqueado por dos escaleras ornamentales, la Font Nova, una bodega tras un muro, un puente, un Oasis en medio del bosque, construido íntegramente en piedra.
































































































































Se sube por el puente, aparece una balsa de piedra con un tronco dentro, a la que llega una canalización semi invadida por la vegetación y van surgiendo unos pinos de troncos inmensos de unos 40 metros de altura, debo agradecer a mi compañero de ruta que me avisara con mucho respeto, de que iba con la boca abierta, para que la cerrara por si nos cruzábamos con gente. Pasados varios senderos, aparecen unas piedras perfectamente dispuestas en forma de círculo, con unas castañas, lo llama "Aquelarre", (ver fotos), después seguimos por unos senderos que acaban en el Torrent de Sant Iscle luego pasamos por el cruce de Forat del Vent, pasamos por el pino de El Mecedor, desde donde se podían apreciar las fotos típicas de un columpio, un columpio que aparece y desaparece, podéis buscar "Columpio de Barcelona" o "Mirador de Horta" en Google:










Columpio de Barcelona.



Más abajo hay otro pino al que le han puesto también un cabo dónde columpiarse, desde ese punto y bastante desnivel después llegamos a la carretera, la cruzamos franqueando los salva railes y continuamos por el otro lado, para llegar al punto de partida.
















 


Montaña mágica

Descripción picos: Album Compartido Rafel Alsina Dalmau